Dir. Thierry Poiraud & Benjamin Rocher / Francia / 121 minutos
La idea de mezclar el fútbol y el cine de zombies suena bastante tentadora en el papel, lo que resulta lamentable es que no siempre se pueden materializar correctamente las buenas intenciones.
Todo comienza cuando el humilde equipo de la Ciudad de Caplongue recibe la visita del club París, pero el principal atractivo no es solamente la visita de un equipo importante, sino que entre sus filas se encuentra un jugador proveniente de esa pequeña ciudad, quien es recibido como un gran traidor por los aficionados locales. Por otro lado, el padre del jugador estrella del Caplongue le suministra a su propio hijo una sustancia que presuntamente serviría para incrementar su fuerza física, sin embargo no es lo único que sucede, pues termina mutando en una especie de super zombie que segrega por la boca una especie de vomito blanco que va transformando a quien tiene la desgracia de tocarlo. Una vez que este personaje invade la cancha durante el partido entre los equipos ya mencionados, se desata el caos que termina de la manera mas violenta posible y con algunos jugadores y decenas de espectadores infectados. El resto de la cinta cuenta la clásica y genérica historia de supervivencia de los protagonistas, siempre dejando a uno o dos secundarios por el camino. La pelicula está dividida en dos partes que se complementan, simplemente para establecer una diferencia entre las visiones de ambos directores.
Goal of the dead me parece realmente larga para que al final termine por ofrecer lo mismo que todas estas películas derivadas y parodiadas al estilo de Shaun of the dead. Y aunque la atmósfera durante el ataque en la cancha de fútbol es realmente buena, termina por no sobresalir en ningún otro aspecto.
Por Jonathan Mata Richardson
CinePárrafos 