Dir. Josh Gordon & Will Peck | Estados Unidos | 105 minutos
Sinopsis: A Clay (T. J. Miller) las cosas no le van bien a nivel profesional. Su estirada hermana, Carol Vanstone (Jennifer Aniston), CEO de la compañía, amenaza con cerrar su sucursal, así que Clay, gerente de dicha oficina, decide organizar una fiesta navideña épica para intentar conseguir a un nuevo cliente. Pero no contaba con que la fiesta se saliera de control. (FILMAFFINITY)
No voy a negar que soy fiel partidario de las comedias ambientadas en espacios laborales, principalmente oficinas, sin embargo hay una serie de clichés en cuanto a personajes que simplemente no evoluciona.
Fiesta de Navidad en la oficina es un filme que no propone nada novedoso, incluso dentro de la comedia cimentada sobre lo más superficial, diseñada únicamente para pasarse una tarde empacándose un buen bote de palomitas.
No voy a mentir al decir que no me reí en un par de ocasiones durante la proyección, pero ahora -unas 24 horas después del visionado- ni siquiera puedo recordar los momentos específicos en los que dicha reacción se llevó a cabo. Ojalá estuviera exagerando, el boleto me costó.
¿Qué me impulsó a ir al cine a ver esta cinta? Jennifer Aniston, sin duda; y la verdad es que la blonda es la que menos queda a deber. Enfundada en la piel de una jefa fría y calculadora, la ex Friends exhibe sus grandes dotes para los papeles en los que el resto de los personajes desarrollan un cierto asco hacia su persona. Cosa que, por supuesto, termina por revertirse. Más o menos.
¿Recomiendo el visionado de este film? Por qué no, en las circunstancias correctas puede resultar una experiencia entretenida, pero ojo, eso no quiere decir que sea una película precisamente buena. Para matar la tarde quizá. Fiesta de navidad en la oficina, bastante lejos de conseguir un ascenso.
Por Jonathan Mata Richardson
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